Cómo elegir el mejor hosting para alojar tu web

Al final te has decidido a poner en práctica tu fabulosa idea para tu negocio, o para cualquier otro tipo de proyecto. ¡Enhorabuena!

Pero claro, tu nivel técnico es medio – bajo, y a la hora de elegir un sitio en donde alojar tu proyecto con WordPress, puede que te pierdas un poco. No te preocupes, estás en el artículo correcto.

A lo largo de estas líneas, te voy a explicar lo que tienes que tener en cuenta para no elegir un alojamiento web, y lo que sí que tienes que tener en cuenta para elegir el mejor hosting para tu proyecto y que se adapte a tus necesidades.

Aclaraciones previas

Antes de entrar en materia, quiero explicarte una serie de conceptos clave y terminología que tienes que tener clara antes de seguir leyendo las siguientes secciones del artículo.

Seguro que has escuchado en varias ocasiones alguna (o todas) de estas palabras que te suenan a chino, y te has quedado con cara de mejor me callo que estoy más guap@.

A todos nos ha pasado, y es completamente normal. Hoy en día la tecnología nos desborda, y no hay que saber nada de memorieta, lo mejor es conocer fuentes de información fiables.

Hosting vs Servidor web

Estas dos palabras que la gente mezcla como el colacao con la leche. Servidor por allí, hosting por aquí…. ¿pero cuál es la diferencia? El idioma.

Simple y llanamente. Puedes llamarlo como te de la gana, pero si eres del os que dice “Google” marcando en la voz el sonido de la “o”, en lugar de transformar la doble “o” en una “u”, te vendrá mejor usar el término servidor.

Si eres de los que busca información por Internet de todo tipo y en cualquier idioma, seguro que ya tendrás más que afianzado el término de hosting web (en inglés). Parece una tontería, pero crea muchas confusiones (como diferenciar WordPress.com de WordPress.org).

Qué es un hosting

Ahora que ya sabemos la gran diferencia entre servidor y hosting, vamos a utilizar el término en inglés.

Un hosting es una carpeta virtual en un ordenador (propio o alquilado) en donde almacenas unos datos en ficheros, para mostrarlos de manera privada o pública a quien tú quieras. Es decir, en el caso de WordPress, todos los ficheros que te descargas de WordPress.org, irán a parar a esa carpeta.

Cuando tengas un dominio comprado, dicho dominio tendrá que “mirar” lo que hay en esa carpeta, para poder mostrar su contenido. Hablo de carpeta en el sentido más simple, ya que puedes tener un hosting con varias carpetas, con diferentes webs o aplicaciones en ellas (no sólo de WordPress).

Lo que te tiene que quedar claro es que, un hosting, es un espacio físico que alquilas en un ordenador, que normalmente se encuentra en un edificio grande con muchos ordenadores, bien cuidados y vigilados.

Ten en cuenta que el ordenador que contenga el espacio que tú alquiles mensualmente, deberá estar funcionando 24 horas, 7 días de la semana, para que tu web esté accesible siempre, se visite cuando se visite.

Aquí ya tienes una pista de lo que hay que buscar en un hosting: calidad en cuanto a hardware (ordenadores físicos), que funcionen bien y no se cuelguen.

Qué es el uptime

Aquí entra en juego el tiempo que ese ordenador está activo, mostrando tu web.

Si llega un momento en que se produce mucha actividad dentro del ordenador (muchas visitas, que requieren cargar tus archivos muchas veces), esto cansará a la máquina, y hará que se quede colgada o no responda por cierto tiempo.

Esto es lo que se llama el uptime, idealmente tiene que ser superior al 99% (que es lo que se ofrece en la mayoría de los hostings de fiar).

Qué es un CDN (Content Delivery Network)

Un CDN es un término más complicado y avanzado. Lo que sí que puedo decirte es que con un CDN, podrás mostrar de una manera igual de rápida, el mismo contenido a alguien que te visite desde tu misma ciudad, y a alguien que te visite desde Australia.

Esto es posible gracias a que a través de un CDN, la información de tu web se va copiando en varios ordenadores repartidos por todo el planeta, y así, esa “transmisión” de información se acorta, ya que siempre hay un ordenador disponible con tu web, cercano a más cualquier sitio desde donde te estén visitando.

Qué diferencias hay entre hosting compartido, privado (VPS) y dedicado

Dependiendo de lo que necesite tu web (lo vemos en la siguiente sección), te convendrá más un tipo de hosting u otro. En la gran mayoría de casos, optarás por el primero o el segundo, pero no te preocupes, porque un buen hosting te permitirá cambiar de uno a otro con poco esfuerzo.

Hosting auto-gestionado

Es un concepto o servicio relativamente nuevo. Es un tipo de hosting muy enfocado a una tecnología en particular, en donde tú te olvidas de toda la parte de mantenimiento técnico, y cualquier pregunta que tengas es respondida y gestionada por una persona de soporte.

Digamos que este tipo de hosting es el más cómodo, ya que no tienes que preocuparte por nada a nivel técnico. Lo tienes todo auto-gestionado, y solo tienes que preocuparte por el contenido de tu web.

Hosting compartido

Tal y como indica el nombre, en un hosting compartido se comparte el espacio en un ordenador.

Esto tiene sus ventajas y desventajas. Como ventajas, que es más barato, más asequible, no tienes que lidiar con demasiadas configuraciones (ya que el propio hosting se encarga de mantenerlo) y es sencillo de utilizar en general.

Como desventajas, aunque pocas, se mencionan la disponibilidad de recursos y las limitaciones que hay en términos de seguridad. Por ejemplo si tienes una web vecina en tu mismo hosting compartido, que recibe muchas visitas (pero muchas muchas), esto va a hacer que los recursos destinados a tu web, por ese ordenador compartido, se vean un poco limitados.

Hosting VPS (Virtual Private Server)

Es tener tu propia parcelita dentro de un hosting, la cual te asignan mediante una partición de disco, sólo para ti. En este tipo de hosting, tienes muchísimas más opciones y control sobre lo que tienes alquilado.

Si necesitas más memoria RAM, pues añades más. Si necesitas más recursos, pues los tienes. Su uso es principalmente para medianas empresas, con una web prominente, o para aplicaciones algo complejas, que requieren estabilidad, rendimiento y seguridad.

Hosting dedicado

Aquí tu ya eres el master del universo. Tienes a tu disposición tu propio ordenador, sin compartir con nadie, y con todos los recursos que quieras.

Eso sí, es el hosting más caro, y requerirá de ciertos conocimientos más técnicos y avanzados. Es el típico tipo de hosting que contratas cuando ya te toca delegar la web a manos de uno o varios expertos técnicos, que se ocuparán de todo por ti.

Y tu web… ¿Qué necesita?

Aquí es en donde más atención debes tener. Piensa en cuando te compraste tu primer coche: ¿para qué lo querías? A ver si puedes sentirte identificado con alguno de estos escenarios:

  • Necesitas una web para “ir tirando”, en la que sabes que no tendrás grandes picos de visitas, y que usarás para mostrar quién eres, qué haces y cómo contactarte: te recomiendo cualquiera de los dos primeros tipos de hosting.
  • Tienes una web que ya recibe bastantes visitas mensuales, y necesitas ir añadiendo más contenido y funcionalidades, ya que vendes productos online, o tienes cierto servicio de membresía mensual: te recomiendo el VPS.
  • Eres un o una magnate web, y apareces como primer puesto en Google cuando alguien busca por tus palabras clave. Recibes miles de visitas al mes, y tienes varias personas subcontratadas, para que editen el contenido de la web constantemente; además tienes uno o varios técnicos que se ocupan de los pequeños (y grandes) problemas que pueda tener la web, y brindan soporte técnico a todo el mundo: definitivamente, contrata un servidor dedicado.

Lo más importante es que no te dejes seducir por los super extras que ofrecen los hostings, y el gran espacio de almacenamiento que te vendan (a veces surrealista).

Al igual que con algunos extras de coche que no te hacen falta, cíñete a lo que en ese momento necesites, y contrata lo justo. La buena noticia es que, al contrario que con un coche, cuando necesites escalar y añadir extras a tu hosting, podrás hacerlo.

Malas prácticas de algunos hostings a evitar.

La verdad quiero que no te den gato por liebre, y que sepas reconocer, en términos generales, un mal hosting. Si detectas cualquiera de estas características, empieza a plantearte elegir otra opción para tu web.

 Servicio hiper-mega-velocidad-luz de rápido

Cuando ves que en la página de ventas del hosting, hacen hincapié en que sus servidores van a la velocidad de la luz, aunque el precio sea muy bajo. Ponlo en duda.

 Mala interfaz de usuario

Cuando ya has contratado el hosting, y entras a un panel de administración en donde te pierdes, y que no termina de ser agradable, usable, y sobretodo útil. Pide que te devuelvan el dinero.

 ¿Soporte? ¿Qué soporte?

Cuando tienes tu primer problema o duda, y no encuentras de manera clara un formulario de contacto o un sistema de tickets de soporte. Pide aquí también tu dinero de vuelta.

 Extras inesperados

Cuando tú habías contratado un servidor por X dolates al mes, y la factura que te envían al contratar un año entero, arroja un precio de X más Y, más Z, que son dos extras que no sabías que habías contratado (y que aparecen en los términos y condiciones que nadie se lee, del contrato inicial con el hosting).

Busca un hosting transparente con los precios.

 Hosting a precio de montadito de queso

Velocidad del rayo, espacio ilimitado, bases de datos ilimitadas, todo por lo que cuesta un montadito de queso en un bar. No te fíes, nada es gratis.

 Devolución de dinero difícil

No te ha terminado de gustar el servidor, y además de no poder encontrar fácilmente el formulario de devolución de dinero, te dan largas y ponen pegas… no vuelvas a pagarles más.

 No cesan en intentar venderte extras

Te han venido el servidor del montadito de queso, y luego te bombardean con emails para venderte un servicio de creación web, o un fantástico y maravillosamente anticuado page builder, con un servicio de protección anti-hackeos de 40 dolares al mes…. cambia de hosting.

 Dominios difíciles de incorporar

Cuando ya tienes un dominio comprado en otro sitio, y no encuentras las DNS de tu hosting para decirle al dominio a donde mirar y qué mostrar. El servidor se empeña en que traspases el dominio a sus servicios contratados contigo. No.

 Hosting gratuito

Aquí no me extenderé: no hay nada gratis y bueno a la vez.

 Espacio ilimitado nivel Dios

Te prometen el oro y el moro en cuanto a espacio, pero cuando realmente lo necesitas (pasados varios meses o años) te aumenta la factura mensual con un “extra” para ese espacio de más. (¿¿Pero no era ilimitado??)

 Problemas por doquier

Notas que tu web de WordPress alojada en sus servidores se cuelga, que no va rápida, que aparecen continuos errores de servidor… no estás a gusto, cambia de hosting.

 La culpa es tuya desde un principio

Por fin consigues contactar con el soporte, y lo primero que te dicen, tras esperar su respuesta una semana es, que revises tus plugins y plantillas, y si continuas con el problema les vuelvas a contactar…. ¡Así no! ¡Uf! Siento este reproche negativo hacia algunos hostings, pero es como cuando entras a un bar, y sabes que no vas a estar a gusto desde el principio.

Siguiendo con la metáfora, hay tantos hostings como bares tu ciudad, así que tú mandas, tú eres quien tiene que estar a gusto y contento con un servicio por el que pagas. Pero vamos a dejar la parte negativa, ahora toca la parte optimista.

Características de un buen hosting

Cuando revises la página de ventas de un hosting en particular, intenta encontrar cualquiera de estas características (cuantas más mejor). Es lo que va a diferenciar a un buen hosting, de un mal hosting.

 Carga rápida optimizada para WordPress

Ofrecen paquetes de hosting, expresamente especializados y optimizados para WordPress. En dichos hostings, se han optimizado diferentes aspectos técnicos en el hardware (discos SSD por ejemplo), para que funcionen mejor con WordPress.

 Escalabilidad

Te ofrecen diferentes packs, cada uno con más extras, y también te dicen (normalmente en las preguntas frecuentes) que puedes ir subiendo de “nivel” cuando quieras, con uno o dos clics, y ellos se encargan del resto. Así sí que podrás empezar pequeño, y acabar gigante, de una manera escalable y que te ahorrará mucho dinero.

 Panel de control amigable

Usan una interfaz de usuario elegante, usable, limpia, con un soporte por chat, y con un control de recursos que ya conoces o te suena: cPanel. Es lo mínimo que hay que exigir, así que, en este caso, adelante.

Certificados SSL al alcance de todos

Te permiten instalar Certificados SSL gratuitos con dos clics (y además te muestran artículos de blog y vídeo tutoriales sobre cómo hacerlo).

Además te ofrecen otro tipo de certificados de más alto nivel de seguridad, por si tus necesidades web así lo requieren. Es algo básico hoy en día, en donde Google exige que todas las webs encripten la información sensible de los usuarios.

Gran soporte, útil y cercano

Para mi, esta es la característica más importante. Siempre vas a tener dudas o situaciones que escaparán a tu control y conocimientos técnicos, así que busca un hosting que se caracterice por un soporte técnico exquisito.

 Uptime de más del 95%

¿Te acuerdas del uptime al principio de este artículo? Recuerda verificar que el hosting en concreto asegura uptime de más del 95% para tu web.

 Servicio de backup opcional

A veces haces un cambio en tu web de WordPress, o instalas (o desinstalas) un plugin que no debías, y se te va toda la web al garete. Poder restaurar una copia del día anterior, con dos clics, es algo que te limpiará el alma y hará que duermas mejor.

Busca un servicio de backup diario (para cuando estés construyendo la web) y semanal (para cuando la estés manteniendo).

Caching opcional

Al igual que el punto anterior, hay muchas maneras de aumentar la velocidad de carga de tu web de WordPress, utilizando plugins de caché (paginas pre-cargadas en el hosting, para que se muestren más rápidamente a las visitas a tu web). Si el hosting que estás considerando, tiene algún servicio de caché incluido en el precio, pues genial.

 CDN integrado con alguna plataforma fiable

¿Recuerdas el concepto de CDN? Si el hosting te facilita la vida para conectar fácilmente los archivos de tu web a cualquiera de los principales servicios de CDN fiables, estás en un buen hosting.

 Herramientas de seguridad y rendimiento opcionales

Volvemos a las opciones que se pueden conseguir mediante plugins, pero que si las incorpora tu hosting, mejor que mejor. Hay incluso hostings que tienen herramientas propias de seguridad y rendimiento.

Conclusiones

Hay muchas empresas de hosting. Hay muchas muy buenas, y muchas muy malas.

Tómate tu tiempo para encontrar la que te gusta, y prueba todas las empresas que necesites. Déjate guiar por las recomendaciones subjetivas de tus conocidos, pero siempre sé fiel a lo que demuestre el servicio (objetivamente hablando), a nivel de profesionalidad.

Encuentra una empresa fiable, cercana, que te trate de tú a tú, con personas reales y que muestren pasión por lo que hacen.

Todo ello se verá reflejado en los servicios que dan, y cómo los dan. Por mi parte ha sido todo, y espero que te haya resultado útil este artículo.

Agregar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *